La música tiene poder. En primer lugar, a través de ella podemos generar conexiones únicas con quienes nos escuchan y/o tocan con nosotros. Así mismo, es una fructífera experiencia de aprendizaje que nutre la imaginación. Hoy en día las fundaciones de música son una gran iniciativa creada para establecer un contacto serio con la música. El cual a su vez mejora y amplia las habilidades en otras áreas de aprendizaje.

Muchos estudios han respaldado el proceso de la música como método de enseñanza. Puesto que ha representado un fortalecimiento de la capacidad de escucha, disciplina, concentración y creatividad.

Un proceso fundamental

Visto desde múltiples aspectos, cuanto más temprano se forma éste lazo con la música, son más las oportunidades de mejorar nuestras habilidades a largo plazo. Así pues, hacer parte de una fundación es disfrutar de un espacio para crear éstas conexiones y ciertamente, transformar tu vida. Del mismo modo, cuando aportas un granito de arena a esta experiencia, estás abriendo puertas para motivar a niños, jóvenes y músicos en formación de salir adelante.

Todos los niños atraviesan un proceso de formación para mejorar sus aptitudes. Sin embargo, actualmente el foco de aprendizaje está más orientado a áreas como español y matemáticas. Restándole el verdadero valor al aprendizaje musical. Por una parte, a través de ella te conectas con tus raíces y la comunicación mejora. La música es la chispa que enciende todas las áreas de nuestro cerebro. Es una corriente, es una puerta abierta al mundo.

Beneficios de las fundaciones de música

¿Por qué elegir la música?

Para comenzar, la mejor razón para hacerlo es que gracias a ella nos encontramos a nosotros mismos. La música nos ayuda al desarrollo de la inteligencia emocional. Esto se refleja en una mejor autoestima y empatía con los demás. Y, ¿Sabes qué es lo mejor de todo? Que todo esto sucede sin ser conscientes, puesto que es un toque directo a nuestras emociones y en la medida que pasa el tiempo, nuestra personalidad cambia. Pero siempre para bien. Como lo hemos mencionado antes, ¡La música tiene poder! y tener un espacio que nos permita explorarla, sentirla y vivirla es asombroso, sin duda.

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Aportar es motivar

Constituir una fundación es todo un reto, pero siempre es gratificante. La actividad musical es del interés de todos y en sí, las entidades que difunden la cultura musical simpatizan con el pueblo. Sin espacios culturales y sin artistas es posible que la vida se convierta en un simple proceso de desgaste.

En la Fundación Pianissimo estamos guiados por crear una cultura del piano y aportar al desarrollo musical de los niños y jóvenes pianistas. Creamos espacios de capacitación, fortalecimiento de los métodos de enseñanza del piano, festivales, concursos y conciertos que motivan a explorar el mundo de la música.

Uno de nuestros proyectos es el Club de amigos Pianissimo, un espacio dedicado a la colecta de fondos para aportar al crecimiento, alcance y desarrollo cultural de nuestra fundación. Con tu aporte contribuyes a la construcción de una cultura del piano para los niños, jóvenes y músicos en formación. Cuando nos apoyas, te conviertes en un amigo pianissimo. ¡No te quedes sin apoyar ésta gran causa! Juntos creamos una cultura en torno al piano de todos y para todos.