La creatividad es una cualidad ligada a la capacidad de interpretar. La creación musical se verá fortalecida en la medida que amplíes tus recursos interpretativos. Así mismo, el desarrollo de ésta mejora la capacidad de aprendizaje y comunicación.

Cuando creas no solo estás aportando al desarrollo de una cultura musical, también estás promoviendo las aptitudes que trae consigo. Tocar el piano más allá que un reto, es una experiencia liberadora. A través de él podrás explorar nuevas maneras de expresarte enlazando tus conocimientos con motivación y determinación. Cabe resaltar que la música es un canal que incentiva la imaginación.

Cómo estimular la creatividad

En la enseñanza del piano existen muchos métodos para mejorar las capacidades de los alumnos. Ahora bien, hay tres prácticas que son las más efectivas a la hora de mejorar la interacción con el piano y que a su vez estimulan la creatividad:

• Repertorio mixto: Uno de los mayores plus en la música es contar con un amplio repertorio. Pero más allá de eso, es la capacidad para aprovechar esos conocimientos a la hora de la ejecución y creación. Explorar diversas técnicas e intenciones musicales permite ampliar nuestra visión para componer una obra.
• Nuevos ejercicios: Cuando tocas el piano hay ejercicios que suelen ser repetitivos, por lo tanto, ya solucionados, puedes explorar variaciones del mismo ejercicio como: Otra tonalidad, cambios rítmicos o pequeños adornos que lo hacen «más divertido».
• Improvisación: Ejercitar el cerebro y suprimir nuestras cargas es el mejor método para fortalecer la creatividad. La práctica de la improvisación te da una «libertad creativa» donde no solo salen nuevas sonoridades, también, formas un vínculo con tu compositor interior.

Consejos para componer una canción

No a todo el mundo se le da bien componer pero si ligas la paciencia con una mente abierta se convierte en una práctica más alcanzable. A continuación te daremos algunos trucos para empezar a componer:

• ¿Qué quieres transmitir?: Para saber qué melodía crear debes identificar lo que quieres transmitir a través de ella. A partir de eso podrás comprobar si lo que estás componiendo te da realmente esa sensación.
• Identifica la estructura: Para componer de forma correcta debes tener claras las parte de una canción: Introducción, verso, puente, coro o estribillo.
• Originalidad: Toda canción tiene una parte que el público reconoce de inmediato, incluso sin la letra. Ese es el gancho de tu creación y lo que le dará ese toque genuino.
• Termina la armonía: Muchos músicos cometen el error de pensar en la letra antes que en la sonoridad. Toda canción parte de una intención musical y luego, en ese rumbo surgirá la letra que mejor se acomoda a ella.

¡No te bloquees!

En todo proceso de creación se presentan los atascos, pero no es un obstáculo para llegar al resultado final deseado. La creatividad no es un don divino y cualquiera que se lo proponga puede desarrollarla. Como lo hemos mencionado anteriormente, la creación musical es una práctica que requiere de paciencia e iniciativa. No rendirse es el paso que demarcará tu obra:

• Utiliza referentes. No se trata de imitar sino de aprovechar canciones existentes a las cuales le puedas dar tu toque personal y finalmente, suene a algo totalmente propio.
• Usa la narrativa. Todas las canciones cuentan historias y el éxito está en cómo aprovechas la música para contarla con todos sus matices.
• Analiza éxitos. La mayoría de los éxitos musicales tienen puntos estructurales comunes. Conócelos y haz uso de ellos para tu creación.
• Reproduce tu obra. En la medida que avances es importante que vayas escuchando lo que haces para identificar si vas por buen camino.
• No te rindas. Nadie dijo que componer sería fácil, por eso ten paciencia y recuerda que el triunfo está en la continuidad y variedad.

Existen múltiples recursos en línea donde podrás buscar inspiración, aprender y conocer otros músicos que aporten a tu obra. Además, hay espacios donde podrás compartir tu trabajo y fortalecer tu proceso de interpretación. ¡La clave está en no desfallecer!